Le conté a Jorge que hubo un tiempo en el que tenía hasta $500.00
Jorge me pregunto: ¿¡ Entonces porqué cuando yo te preguntaba si tenias saldo, me contestabas que NO !?
y le contesté: Soy egoísta ¿recuerdas?
Jorge: Sí, ya recuerdo... Salimos a comprar a la tienda, la señora preguntó ¿Tienes cambio? Leonardo mete su mano en el bolsillo, saca muchas monedas, le bastaba con dos de ellas para pagar lo que quería, las observa tranquilamente y las vuelve a guardar en su bolsillo, mira a la mujer profundamente y con uno tono de voz calmado y firme contesta: NO.
Pero bueno, no me juzguen como un vil y extraño ser, que ustedes no se librarían de serlo desde mi punto de vista, además, no siempre soy egoísta, cuando hay un exceso de secreción de Oxitocina en mi organismo, dejo de ser egoísta y doy el dinero.
Así regresamos a mis dos famosas definiciones:
"Egoísta es el que no da y Envidioso el que desea lo de los demás."
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