Me he percatado que: cuando quieres mucho a una persona y le estimas, la despedida de alarga proporcionalmente al cariño que se le tiene. En cambio, cuando una persona que no quieres que te salude y te saluda.... puede llegar a ser un infierno tan solo saludar.
Aunque solo con una persona en particular me ha sucedido lo contrario, quienes me conozcan mucho sabrán ya de quien y los que no conozcan las particularidades de mi vida al menos imaginarán el papel de tan importante persona y su desempeño.
Los saludos inician tan cordiales y se prolongan en tiernas palabras de amistad, las pláticas son constantes adoraciones y la despedida es una cola tan larga como para poder pisarla cien y mil veces...
bueno, sucumbiendo ante el sueño, me despido
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Bonsoir mon ami. Muy buen blog. Y eso es muy cierto, aunque a veces pueden pasar tan rapido las despedidas, sobre todo cuando quieres que se alargue y se va de lo mas rapido. Pero bueno tambien queria comentar el de tu hermano y a esa edad son asi, unos desinteresados respondones, pero bueno te dejo. Au revoir =D TK
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